¿CÓMO SE FABRICAN LOS ENVASES DE VIDRIO?

El vidrio se considera uno de los materiales más puros que hay y se puede llegar a reutilizar unas 30 veces.

Su fabricación empieza con el fundido de una serie de materias primas como el carbonato de sodio, la caliza, la dolomita, el dióxido de silicio, el óxido de aluminio y cantidades muy pequeñas de agentes aditivos.

Todos estos materiales se juntan y se introducen en un horno industrial especial a 1.500º para que se fundan. Esta es la etapa más larga de la fabricación del envase de vidrio y puede llegar a durar unas 20 horas.

Una vez se ha fundido, se corta y se lleva a las máquinas de formación que es donde se dará la forma al vidrio, gracias al uso de un molde. En este caso, las máquinas trabajan a 1.200º.

Una vez se ha creado el envase de vidrio, se lleva a un proceso de enfriamiento paulatino y se reduce su temperatura a los 100º.

Terminado el proceso de enfriamiento, el envase se somete a una inspección donde se retiran todos aquellos tarros que puedan tener alguna tara.

Por último, los envases serán empaquetados para su uso.